Disparó y mató pero fue absuelto por la justica

La justicia determinó que el disparo se dio en un contexto de “legítima defensa privilegiada” y decidió que el imputado fuera absuelto.

Silvestre Machuca estaba en un campo de la zona rural de Avellaneda. Allí trabajaba en campo de Luis Marchetti cuidando chanchos. Vivía en el mismo campo junto a su esposa e hijos.

En la madrugada del domingo 11 de febrero un grupo de cuatro jóvenes ingresaron a la propiedad a robar y para poder actuar con impunidad decidieron cortar la energía eléctrica. Allí es donde Machuca salió con un arma y efectuó un disparo en medio de la oscuridad. No supo hasta el amanecer que el disparo había dado en el cuerpo de  Joatan David Ojeda, que en ese momento tenía 21 años.

Machuca fue detenido por el violento hecho y luego llevado a juicio. Sus defensores Ricardo Degoumois y Mariana Zechin mantuvieron siempre en alta la bandera de que el disparo se trató de un acto de legítima defensa y con esa postura llegaron al juicio.

Por el contrario los abogados querellantes Andres Ghío y Luciana González fueron con la misma postura que el fiscal Aldo Gerosa buscando una pena por homicidio. Gerosa pedía 11 años y medio de cárcel y los querellantes pretendían 31 años de cárcel.

Los jueces Gustavo Gon, Martín Gauna Chapero y Claudia Bressán entendieron que el hombre no podía ser condenado por el acto y decidieron absolverlo y convalidar la teoría de la defensa.

La opinión del fiscal

Tras el fallo habló el fiscal Aldo Gerosa con el programa radial La Grieta y dijo que “con las mismas evidencias fiscalía, querella y defensa tuvieron tres posiciones distintas, puede haber una cuarta también, en este caso sería muy parecida a la de la defensa”, dijo haciendo referencia a lo que acababa de escuchar en los tribunales de Reconquista.

Gerosa sostiene que si se trató de legítima defensa porque realizó “un tiro al aire y lo mató es incoherente. Y si le tiró al cuerpo, en la circunstancia a la que se llegó en la autopsia, las declaraciones que se produjeron y el lugar donde se produjo el disparo no podría decirse que es legítima defensa, a mi criterio”.

El fiscal se apoya en esta teoría aduciendo que el cuerpo estaba “78 metros alejado de la casa y a unos 40 metros alejado del chiquero”, además de que el impacto fue recibido “de costado por lo que no estaba atacando a nadie”.

Ahora resta que el tribunal de a conocer los fundamentos del fallo, que estarán en algunos días, y luego el fiscal asegura que realizará una apelación para que la decisión sea revisada por la Cámara de Apelaciones de Vera.

La versión del defensor

Ricardo Degoumois también dio su versión de los hechos en el programa radial La Grieta y sostuvo que “se ha  acreditado, incluso con el testimonio de los familiares del fallecido, que habían ido cuatro personas a ese lugar a robar” y dijo que acreditar eso era fundamental en su teoría del caso porque “el poder ofensivo de que te ingrese una persona en la madrugada no es el mismo que si ingresan cuatro”.

Dijo Degoumois que ni siquiera se pudo probar que el disparo que realiza Machuca es el que termina impactando en el fallecido. “¿Por qué digo que no tenemos la certeza? porque nadie ha acreditado nada y Machuca dice ‘yo no sentí nada, hice un disparo persuasivo para que se vayan'”.

“A esto debemos agregar, que se probó sobradamente, que uno de los integrantes de esta banda, contó en fiscalía, que al que llaman ‘rosarino’ lo amenazó y le dijo ‘si vos llegás a hablar te meto un tiro a vos y a tu mujer’. Obviamente estamos hablando de la peligrosidad y de personas de armas alzar”, siguió.

Finalmente el penalista confirmó que ni la fiscalía ni la querella presentaron ni la escopeta, ni los cartuchos, ni las vainas servidas como pruebas en el juicio, por lo que el tribunal ni siquiera puede someter esa prueba a análisis.