“En Reconquista no hay justicia independiente”: dura crítica del abogado Gustavo Feldman

En una decisión de alto impacto, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe ha resuelto intervenir en el largo y controvertido proceso judicial del concurso de acreedores de Vicentín.

Esta resolución ha sido considerada por muchos como un freno decisivo a la propuesta de reestructuración presentada por la empresa, generando reacciones en diversas esferas, desde el ámbito empresarial hasta el político. En diálogo con La Grieta, el abogado Gustavo Feldman, quien representa a uno de los principales acreedores de Vicentín, compartió su visión sobre este fallo, subrayando la importancia del mismo en la transparencia y dignidad del proceso judicial en Santa Fe.

Un paso clave hacia la transparencia judicial

Según Gustavo Feldman, la reciente resolución de la Corte “significa que el lado transparente, el lado bueno, el lado digno de la justicia santafesina está llevando adelante las cosas como deben ser”. En un contexto donde, como señaló el abogado, la justicia ha sido cuestionada por supuestas interferencias políticas y económicas, esta decisión de la Corte se presenta como un paso hacia la rectitud judicial. Feldman destacó que la Corte Suprema ha priorizado la aplicación de la ley y la Constitución sobre intereses subalternos, frenando así lo que describió como una “propuesta ignominiosa” por parte de Vicentín.

Vicentín, una empresa que históricamente ha sido uno de los gigantes del comercio de granos en Argentina, se encuentra en un proceso concursal desde 2020, después de haber incurrido en un colapso financiero que afectó a cientos de acreedores. Feldman recordó en la entrevista la importancia estratégica de la actividad de la comercialización de granos para la República Argentina, señalando que no se trata solo de un sector económico relevante, sino de una actividad estratégica en el contexto mundial actual. “No creo que sea en vano repetirlo”, agregó, insistiendo en la trascendencia de este fallo para proteger el interés público.

Un recorrido judicial plagado de controversias

El fallo de la Corte Suprema llega en un momento en el que el proceso judicial de Vicentín ya había generado múltiples debates. El juez Fabián Lorenzini, quien ha estado a cargo del concurso en el Juzgado Civil y Comercial de Reconquista, había aprobado una reestructuración que incluía una significativa quita de la deuda de la empresa, una medida que fue duramente criticada por diversos sectores. Según Feldman, esta decisión de Lorenzini fue “revocada por la Cámara de Apelaciones de Reconquista, y ahora la Corte Suprema ha intervenido para devolver el expediente a primera instancia, exigiendo que se dicte una resolución acorde a derecho”.

El abogado fue enfático al criticar la resolución de la Cámara de Reconquista, calificándola de “groseramente contraria a derecho”. Según su análisis, esta resolución respondía más a presiones locales y políticas que a una interpretación rigurosa del marco legal. Feldman no dudó en afirmar que “en Reconquista no hay justicia independiente e imparcial”, una acusación que refleja las tensiones entre las partes involucradas en el proceso judicial.

Además, Feldman señaló que la propuesta de reestructuración de Vicentín ya había sido objeto de duras críticas en 2022, cuando incluso desde la Corte se había insinuado que la misma era inviable. “No lo dijeron con esas palabras, pero lo que plantearon fue claro: la propuesta de Vicentín era un mamarracho”, afirmó Feldman.

¿Qué sigue para Vicentín?

La resolución de la Corte no pone fin al proceso, pero establece un punto de inflexión importante. Según Feldman, se espera que “antes de fin de año” se dicte una nueva resolución que podría revocar definitivamente la quita propuesta por Vicentín. Esto generaría un nuevo escenario para la empresa y sus acreedores, quienes hasta ahora han estado divididos en cuanto a la viabilidad de la propuesta de la empresa.

En relación con los acreedores, Feldman subrayó que “es muy difícil que una resolución judicial contento a todas las partes”, pero insistió en que lo importante es que se respete la legalidad y se protejan los derechos de todos los involucrados, desde los trabajadores hasta los acreedores internacionales. A pesar de la complejidad del caso, Feldman expresó optimismo, destacando que la intervención de la Corte podría sentar las bases para una solución más justa y acorde a derecho.

Intereses políticos en juego

Otro aspecto relevante de este proceso ha sido la fuerte influencia política que ha rodeado al concurso de Vicentín. Desde el inicio del proceso, diversos actores políticos, tanto a nivel local como provincial, han intervenido en el debate público sobre la empresa, en muchos casos defendiendo sus intereses o los de la comunidad en torno a la cual Vicentín ha desarrollado sus actividades. En este sentido, Feldman no dudó en criticar la interferencia de figuras políticas como el intendente de Avellaneda y el senador departamental, quienes han apoyado la propuesta de Vicentín.

Feldman mencionó que desde el principio había señalado la falta de independencia judicial en Reconquista, lo que, según él, ha quedado reflejado en las resoluciones adoptadas por la Cámara local. “El concurso nunca debió tramitar en Reconquista”, afirmó, insistiendo en que la justicia en esa jurisdicción no ha sido imparcial debido a la influencia de actores locales con intereses en el resultado del proceso.

La Corte Suprema y su papel en el futuro del caso

La Corte Suprema de Justicia, con su intervención, ha puesto en jaque las resoluciones de los tribunales inferiores y ha dejado claro que el caso debe ser resuelto con base en los principios constitucionales y legales. Feldman destacó la importancia de que este tipo de decisiones se tomen sin atender a las presiones sociales o políticas locales. “Una resolución contraria a derecho, aunque satisfaga a una pequeña comarca o a un grupo local, no es una resolución que se ajuste al plexo legal”, afirmó el abogado, criticando el fallo de la Cámara de Reconquista en esos términos.

En cuanto al futuro del proceso, Feldman explicó que, si bien aún queda un largo camino por recorrer, la intervención de la Corte es una señal positiva para los acreedores que buscan recuperar parte de las deudas que la empresa tiene con ellos. La clave, según el abogado, será que el próximo fallo sea acorde a derecho y no esté condicionado por intereses externos al proceso judicial.

Con el fallo de la Corte Suprema, el caso Vicentín da un giro importante que podría redefinir el futuro de la empresa y su relación con los acreedores. A medida que se acerque una nueva resolución en primera instancia, las expectativas están puestas en que el proceso finalmente avance de manera más clara y justa para todas las partes involucradas.