En la provincia de Buenos Aires Diego Santilli y Facundo Manes intentarán mantener la distancia de cuatro puntos de ventaja que obtuvieron en las PASO ante el FdT. En CABA, se buscó -con las consignas “Basta” y “Yo decido”- evitar el crecimiento de la opción de Avanza Libertad que encabeza Javier Milei.
La alianza opositora Juntos por el Cambio llega a las elecciones legislativas de este domingo con la expectativa de sostener el resultado de las PASO y comenzar a dirimir las tensiones internas y los liderazgos de cara al futuro, tras una campaña atravesada por la situación judicial del expresidente Mauricio Macri.
En la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, Diego Santilli y Facundo Manes intentarán mantener la distancia de cuatro puntos que obtuvieron en las PASO frente a la fórmula del Frente de Todos que encabeza Victoria Tolosa Paz.
Según el escrutinio definitivo de las PASO que se celebraron el 12 de septiembre pasado, Juntos alcanzó el 37,33 por ciento de los votos, mientras que la lista del Frente de Todos se ubicó en segundo lugar con el 33,25 por ciento.
En la Ciudad de Buenos Aires, en tanto, la nómina que encabeza María Eugenia Vidal también tratará de confirmar el triunfo alcanzado en septiembre, cuando obtuvo el 48,17% del total entre las tres fórmulas que disputaron las primarias mientras que, desde el Frente de Todos, Leandro Santoro se ubicó en el segundo lugar con el 24,71% de los sufragios en la categoría de diputado nacional.
En la Ciudad en particular, parte de la campaña -que tuvo como ejes las consignas “Basta” y “Yo decido”- estuvo apuntada a evitar el crecimiento de la opción de Avanza Libertad que representa el economista Javier Milei, que en las PASO obtuvo el 13,70% de los votos, muchos de ellos a expensas del voto histórico de Cambiemos.
A la búsqueda de mantener y ampliar la ventaja que obtuvo a nivel nacional, la intención de Juntos por el Cambio pasa por lograr el número de 120 diputados en el Congreso Nacional y poder quebrar la mayoría de décadas que ostenta el peronismo en el Senado.
Este último objetivo concentró caminatas de los principales referentes partidarios por las ocho provincias donde se eligen senadores nacionales, con recorridas que incluyeron a los referentes nacionales de la coalición opositora como Patricia Bullrich, Horacio Rodríguez Larreta y Mauricio Macri, entre otros, buscando sumar los cinco senadores que harían posible este logro.
La situación judicial del expresidente Mauricio Macri, que atraviesa horas decisivas, en la causa donde se investiga el espionaje ilegal a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan, y su comparecencia ante el juzgado federal de Dolores, también se colaron en la campaña electoral.
Desde el punto de vista político, Macri organizó un acto en la plaza de Dolores para acompañar su primer declaración judicial, en el cual solamente dijeron presente dirigentes del PRO, con la notoria ausencia de radicales y referentes de la Coalición Cívica.
Macri también generó ruido en la campaña cuando respaldó públicamente al libertario Milei, justo en momentos en que la lista de Vidal multiplicaba sus esfuerzos por retener el voto de derecha e incluso el exministro López Murphy organizaba un acto para “fidelizar” a esos votantes.
Los resultados que se conozcan este domingo a la noche también marcarán un punto de inflexión para varios candidatos de Juntos por el Cambio lanzados a la conquista de un horizonte nacional.
Horacio Rodríguez Larreta, quien eligió personalmente a Santilli y Vidal para que encabecen las nóminas bonaerense y porteña, confía en posicionarse con un eventual triunfo de ambos postulantes.
Patricia Bullrich ya dejó en varias oportunidades en claro que también tiene aspiraciones, y lo confirmó días pasados en un acto compartido en Jujuy con Gerardo Morales, el radical que gobierna la provincia norteña.
Asimismo, aún queda la duda de si el propio Mauricio Macri querrá encarar lo que el mismo denomina su “segundo tiempo”, en alusión al libro autobiográfico que tituló “Primer Tiempo”, y en el cual narra su paso por la Presidencia.
Los radicales, en tanto, también juegan fuerte y una serie de resultados electorales los envalentona para ser protagonistas rumbo a las presidenciales.
Los buenos números cosechados por el neurólogo Manes en la interna bonaerense -más de un millón de sufragios- y el contundente resultado que obtuvo Gustavo Valdés para asegurarse su reelección al frente de la provincia de Corrientes, alientan estas expectativas.
La UCR lo dejó en claro al organizar un acto a fines de octubre en el microestadio de Ferro, donde -con la excusa de homenajear al expresidente Raúl Alfonsín a 38 años de su triunfo electoral de 1983- también aprovechó para decir que dará pelea y no dejará esta vez al PRO liderar la alianza opositora.
En la provincia de Buenos Aires, en tanto, Santilli imagina que un triunfo le permitirá consolidar su intención de postularse como candidato a gobernador en el distrito, en una pelea donde también están anotados en la previa Jorge Macri, el primo del exmandatario, Cristian Ritondo y varios intendentes bonaerenses.
En síntesis, si bien la oposición tuvo el mérito de mantener la unidad tras la derrota electoral de 2019, el lunes a la mañana marcará una nueva etapa donde las diferencias y tensiones internas comenzarán a hacerse más notorias en varios planos.
Los distintos sectores en pugna -larretistas versus macristas, halcones versus palomas y radicales versus el PRO- comenzarán una lucha interna y muchas de las alianzas existentes podrían redibujarse y dar paso a la formación de nuevos espacios de poder.
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