Este martes finalizó en el CeNARD de Buenos Aires el primer Campus general rumbo a Dakar 2022, evento que congregó a 480 adolescentes que aspiran a representar a nuestro país en los próximos Juegos Olímpicos de la Juventud.
Luego del éxito del Programa YOG implementado para los Juegos de Buenos Aires 2018 mediante un proceso de detección y desarrollo de talentos, que resultó en una actuación histórica de la Delegación Argentina, el ENARD, en conjunto con la Secretaría de Deportes de la Nación y el Comité Olímpico Argentino, han decidido y con mucho acierto continuar este camino y redoblar la apuesta.
Los casi 500 chicos y chicas que, seleccionados entre más de 9.000, participaron de esta convocatoria en casi idéntica proporción, aun con procedencias disímiles, tienen más que “el sueño olímpico” en común: tienen orígenes en una década con políticas públicas y un gobierno que puso, en primer lugar, un plato de comida en la casa de cada familia. Y tienen además el ejemplo de grandes deportistas y equipos argentinos que desde muy abajo y sin tantas posibilidades la pelearon para llegar a estar en la cima del olimpismo mundial.
Por supuesto que la increíble actuación en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018 marcó otro hito -sobre todo en este grupo de niños y adolescentes-, al igual que los Panamericanos de Lima el año pasado, pero al modesto parecer de quien escribe fueron más consecuencias de lo anterior que causas de este presente.
La propia creación del ENARD lo demuestra. Y más allá de los cambios que pueda sufrir con el pasar de los gobiernos, su trabajo junto con el del COA y las confederaciones marcan el camino correcto. Seguramente perfectible, con cosas para corregir y seguir creciendo. Pero es el camino. Y eso es una muy buena noticia para el deporte argentino.
Nuestros representantes
Vale recordar que, de nuestro norte santafesino, participaron Mateo Jara, de Avellaneda, en bádminton; e Ivar Bordón, de Malabrigo, en ciclismo. Además, el ya olímpico Julio Nóbile fue parte del cuerpo de atletas representantes en 2018 y del programa de Transición al Alto Rendmiento (TAR) que charlaron sobre sus experiencias con los más chicos.
Consultados por el Polideportivo de ReconquistaSF, nuestros embajadores compartieron sus impresiones:
Mateo Jara: “La verdad es que me gustó todo, lo disfruté mucho. Desde los entrenamientos, que fueron completos y sobre todo viendo muchos aspectos del juego, hasta conocer a varios compañeros nuevos, la pasamos muy bien”.
Mateo junto al seleccionado argentino de bádminton.
Ivar Bordón: “Para mí, lo mejor que tuvo el Campus, más allá de poder compartir con muchos chicos de todos los deportes como si fuera una villa, fueron la cantidad de charlas muy útiles que nos dieron explicándonos los derechos y las obligaciones que tenemos desde ahora como deportistas de alto rendimiento, y todas las herramientas que nos brinda el ENARD y los espacios como el CeNARD para poder desarrollarnos”.
Ivar posa orgulloso con los colores de la selección argentina de ciclismo.
Julio Nóbile: “Viviéndolo de una manera diferente a lo que me tocó a mí hace 4 años atrás, me pareció excelente estar compartiendo no solo con los chicos del Campus, sino también con los compañeros del programa TAR, que fue la primera vez que pudimos estar todos juntos y conocernos. Si bien a algunos ya los conocía, coincidir los 40 en esos días fue algo muy enriquecedor, poder escuchar juntos todo lo que el ENARD y los entrenadores tienen para decirnos hace que sin dudas el grupo se unifique y tiremos todos para el mismo lado. Y es muy importante para los chicos también, y más para los que somos del interior, poder compartir toda una semana con los mejores entrenadores del país, absorber todos sus conocimientos, todas las observaciones que pueden llegar a hacerte y que por ahí acá no las veías; y sobre todo el aprender a trabajar y a vivir en equipo, y a manejarse con los valores el deporte las 24 horas del día, más allá de estar entrenando o compitiendo”.
Julio en una de las charlas del Equipo TAR con los adolescentes en el Campus.
Como bien saben los propios chicos, el haber participado de este Campus no implica todavía un pasaje asegurado a Dakar ni vivir del deporte en el futuro, pero es una motivación muy grande para continuar en ese camino. Y más allá de los programas, que un/una adolescente quiera continuar practicando deportes es otra muy buena noticia para el país.
¡Mirá el increible video que preparó el ENARD para despedir a los atletas del Campus Dakar 2022!
https://www.youtube.com/watch?v=WMv8YMI9C9Y&feature=youtu.be
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