La ciudad de Vera fue escenario de un impactante suceso el domingo 15 de diciembre de 2024, cuando el cuerpo sin vida de un bebé con más de 20 cortes en cabeza, cuerpo y extremidades llegó a la Clínica San Roque. La situación comenzó cuando Jésica Fossati, una joven de 24 años con evidentes signos de haber dado a luz, se presentó en el lugar. Más tarde, sus padres llevaron el cadáver del recién nacido, generando una inmediata intervención policial y judicial.
El fiscal de turno, Alejandro Rodríguez, dispuso el traslado del cuerpo a la morgue, donde una autopsia confirmó que el bebé falleció por un shock hipovolémico causado por las heridas cortantes. Desde entonces, Fossati se encuentra internada en el Hospital Regional de Reconquista.
Audiencia imputativa y medidas restrictivas
Este lunes 30 de diciembre, se llevó a cabo la audiencia imputativa donde el fiscal Rodríguez acusó a Fossati de homicidio doblemente calificado, una figura que contempla la pena de prisión perpetua. Los agravantes incluyen su rol como madre y la alevosía, dado que el bebé se encontraba en total estado de indefensión.
A pesar de la gravedad de la imputación, el fiscal y el abogado defensor, Sixto González, acordaron una medida excepcional: Fossati fue puesta en libertad con restricciones, bajo la condición de radicarse en la ciudad de San Cristóbal junto a sus padres, quienes asumieron el rol de “guardadores”. Además, la joven deberá cumplir con estrictas obligaciones, entre ellas:
- Presentarse cada 15 días en la comisaría más cercana.
- Abstenerse de consumir drogas o alcohol.
- No portar armas.
- No salir del país.
- Continuar el tratamiento con la Junta de Salud Mental de la Provincia, que determinará si comprendió la criminalidad de sus actos.
Un embarazo oculto y una familia impactada
Fossati, estudiante de enfermería, había ocultado su embarazo utilizando fajas. Este hecho sorprende, considerando su formación y el acceso a información sobre métodos para interrumpir el embarazo o procedimientos legales como el aborto.
El defensor Sixto González reveló que los padres de Fossati desconocían su estado. Según relató, la familia vive en San Cristóbal y visitaba Vera con poca frecuencia. Coincidentemente, se encontraban en la ciudad por una “circunstancia especial” cuando se enteraron de lo ocurrido. “Para ellos esto cae como un baldazo de agua”, expresó González.
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