Tras el fallo de la Corte, UTE-Ctera resolvió continuar el paro y Ademys sostendrá el plan de lucha

Tras el fallo de la Corte Suprema, el gremio docente UTE-Ctera resolvió continuar la medida de fuerza “en repudio al fallo que habilita a Larreta a hacer campaña a costa de la salud y la vida” y el sindicato Ademys anunció que sostendrá “el plan de lucha” mientras definían las medidas para llevarlo adelante, aunque ya tienen votado en asamblea un paro para el próximo jueves 6 de mayo.

En el caso de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), gremio de base afiliado a la federación Ctera, la determinación fue ratificar el paro docente para mañana en reclamo del “sostenimiento del vínculo a pedagógico a distancia” por razones epidemiológicas, y al mismo tiempo reclamar “dispositivos y conectividad para garantizar la educación”.

Además, desde UTE-Ctera insistieron con el reclamo de que el gobierno porteño cese “la persecución” a los docentes que hasta ahora adhirieron al paro decretado en la CABA, como también a las familias que resolvieron no enviar a sus hijos a las aulas.

En un comunicado con términos bastante duros, el sindicato docente acusó a los integrantes del máximo tribunal de emitir un fallo “que no es una medida a favor de la presencialidad” sino “un atentado contra el dispositivo sanitario del gobierno nacional que, a la luz de los contagios que genera la circulación, dispuso medidas sanitarias para reducir los casos”.

En otro párrafo del documento, UTE-Ctera señaló que “el martes 4 de mayo será recordado como el día en que, mientras quedan apenas 41 camas de terapia intensiva en toda la Ciudad de Buenos Aires, la Corte Suprema decidió que la salud vale menos que la campaña política de Horacio Rodríguez Larreta”.

Por otro lado, desde el sindicato Ademys, inicialmente Asociación de Enseñanza Media y Superior, anunciaron a Télam que la decisión que primaba entre la conducción era el “rechazo al fallo de la Corte” y la continuidad de medidas, que estaban terminando de definir entrada ya la noche.

“Rechazamos el fallo de la Corte Suprema y planteamos la continuidad del plan de lucha”, subrayó la secretaria de prensa de Ademys, Marisabel Grau, ante la consulta de esta agencia.

Otro de los representantes del mismo gremio, el secretario adjunto Jorge Adaro, definió al fallo del máximo tribunal sobre el DNU 241/2021 que había dictado el Ejecutivo como una demostración de la “subordinación” de la Corte a la “política criminal del gobierno de Larreta en relación a la educación”.

Adaro, en relación a eventuales medidas, adelantó que “el jueves habrá una nueva acción de paro” que estará acompañada, dijo, por la realización de “una caravana” en vehículos que irá primero hasta la jefatura de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Parque Patricios, y de allí hasta la localidad de Garín, con la intención de “exigir la incautación de esas vacunas para que estén al servicio de la población”.

En Garín, norte del conurbano, se encuentra el laboratorio Mabxience, del Grupo Insud.

Por otro lado, al referirse a la situación sanitaria y la segunda ola de coronavirus, Adaro remarcó que según el semáforo epidemiológico de la CABA las clases deberían mantenerse en un “sistema virtual” por lo menos “hasta que haya un descenso importante en los casos” y en paralelo un avance “en la vacunación de toda la población”.

Sin embargo, siguió el gremialista de Ademys, el gobierno porteño “tuvo una respuesta totalmente extorsiva” ya que ante las últimas medidas de fuerza llevadas adelante por los docentes “aplicó categóricos descuentos sobre los salarios”.

Otro representante de los sindicatos docentes, Guillermo Parodi, secretario adjunto de UTE-Ctera, había advertido por la tarde, también en diálogo con C5N: “Lo que ha hecho la Corte es extraño: parece que acá estuvieron debatiendo sobre educación, pero lo que estamos discutiendo es sobre salud pública, sobre qué es lo que está pasando en nuestra ciudad de Buenos Aires: hoy 3170 casos en la Capital Federal, la verdad es preocupante”.

Y sobre ese punto, Parodi remarcó: “Es preocupante que no estemos debatiendo cómo bajamos el índice de contagios, nosotros tenemos los datos de que cuando comenzaron las clases presenciales en las escuelas empezó a subir la curva”.