El culpable fue condenado a la pena más severa que pudo dictar el Tribunal de Menores, pero familiares y amigos de la víctima alegan que recibió trato de favor porque su padre posee varias empresas.
El hijo adolescente de un rico empresario estadounidense Brendan Khuri evitó la pena de prisión a la que se enfrentaba por provocar un accidente de tránsito fatal, y en su lugar deberá cumplir entre siete y nueve meses de internamiento en un centro de menores, recogen medios locales.
La jueza del Tribunal de Menores Sabina Helton resolvió que el acusado es culpable del homicidio vehicular de Monique Munoz en febrero de 2020 en Los Ángeles (cargo que él admitió en abril de 2021) y ordenó que el adolescente fuera detenido inmediatamente después de la audiencia, e internado en un correccional para delincuentes menores de 18 años.
Familiares y amigos de la víctima habían exigido que el menor fuera juzgado como adulto, a pesar de que en el momento de la tragedia tenía 17 años, en cuyo caso podría haber enfrentado un máximo de seis años de prisión. Aunque fue condenado a la pena más severa que podía dictar el Tribunal de Menores, los familiares de la víctima alegaron que el adolescente podría haber recibido un trato especial porque es hijo de James Khuri, un multimillonario que posee varias firmas inmobiliarias, empresas manufactureras y negocios de comercio electrónico.
El 17 de febrero de 2020, el menor estaba al volante de su Lamborghini cuando chocó con un Lexus cuya conductora, Monique Muñoz, fue proclamada muerta en el lugar. Los investigadores determinaron que el deportivo iba a más de 160 kilómetros por hora en el momento de la colisión.
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