Murió un reconquistense que había sido apuñalado en un motín

Juan Carlos Lacuadra estaba preso en la cárcel de Las Flores luego de haber sido condenado por varios hechos, entre ellos la violación a un niño que estaba pidiendo limosna en la puerta de una panadería.

Juan Carlos Lacuadra (23) estaba cursando su condena de 11 años de cárcel de efectivo cumplimiento, por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal en concurso real con robo y privación ilegitima de la libertad, lesiones graves dolosas en carácter de autor y encubrimiento en calidad de coautor”.

La condena fue dictada este viernes 26 de octubre de 2018 por el Juez Mauricio Martelossi, luego que llegaron a un acuerdo el Fiscal Aldo Gerosa y el defensor público José Luís Estévez.

El 20 de julio de 2017 Lacuadra persiguió y detuvo a un menor que minutos antes había estado pidiendo limosna en la puerta de la panadería Vicen-Pan (Bv. Irigoyen y Pueyrredón). Lo llevó hasta un baldío que hay frente al dispensario de Barrio Itatí, lo golpeó, lo desnudó y lo violó brutalmente. Después le robó la bicicleta, y hasta se puso la ropa de su víctima antes de huir.

Su víctima corrió hasta un comercio cercano y pidió ayuda. A los pocos minutos los familiares del chico lo encontraron con la bicicleta y la ropa de la víctima y lo entregaron a la policía. Desde ese día Lacuadra estuvo detenido, primero en Reconquista y tras ser condenado en la cárcel de Las Flores.

Otro hecho

Otro grave hecho que Lacuadra tenía en su prontuario era la puñalada que le había propinado a Micael Héctor Garnica, quien casi muere por las lesiones.

El motín

El 23 de marzo ocurrió un motín en la Cárcel de Las Flores donde hubo muertos y también una decena de heridos.

Uno de los heridos, de varias puñaladas, fue Juan Carlos Lacuadra que desde ese día estuvo internado en el Hospital Cullen de Santa Fe hasta ahora que falleció.

El director del efector, Juan Pablo Poletti, explicó que cuando el preso llegó el mismo día de la revuelta, tenía múltiples puntazos, de los cuales tres eran más profundas en el cuello, tórax y abdomen. Además, presentaba quemaduras que complicaron su situación. “El paciente ingresó en estado desesperante y no logró recuperarse nunca”, aseguró Poletti. “Fue sometido a, al menos, seis cirugías pero no logró superar el daño que causaron las heridas”, explicó.